Pues que chido que lo metan para los que les gusta el juego, a mi la verdad no me gusto nada de nada, el gamplay no esta mal,pero todo lo demas lo hace espantoso,KI de SNES se ha de estar retorciendo, y quedando parapelijico en su tumba.
¿POr que? Este KI no tiene personalidad, la tonalidad roja que parece mas de tekken, los personajes con ese diseño tan soso,montono, unidemencional le quita lo mistico ,estilista,obscuroy emblematico a los personajes.Solo pOr mencionar, a orchit, miren su mirada es como la de cualquer chica, seria, serena, nada adrenalica, nada desafiente,nada sexy solo es una chica mas, su voz igual nada que ver con lo original de la original.POr ultimo su presentacion, y cuando acaba un combate la hacen ver totalmente varonil, y salida de una pelicula e holliwood tipo RE, no tiene ese caracter del SNES que era mas bien sexy, atrevida, pero a la ves con inocencia.Esto mismo aplica para mucho personajes.Y eso a su ves que aplica para los personajes, aplica para los escenarios, e incluso para la mera voz de quien grita los combos, pues aqui se oye frenetica y desesperada, y no como en el otro que se oia mas con caracter y miesteriosa.
No estoy diciendo que hiceran el juego tal como el original, y que no inovaran nada, no nada de eso, estoy diciendo que respeten la esencia del juego, ese toque que hace que uno dija, esto es KI, tal como sucede con algunas recientes entregas de MK ,o minimo, que el juego en su conjunto tenga personalidad, que tenga un estilo coherente y unico, pues este es impersonal, cuasi "naco", o macuarro, y es como una revoltura de mas juegos de pelea.
¿valio la pena esperar 17 años?Al menos para los 90 es un no absoluto, lo unico mas salvable es el gamplay que introduce algunas cosillas bien ( pero que algunas cosas hacen que se pierda el impacto en los combos, o el rimto del juego).Solo esperemos que MIcrosoft no agarre mas franquicias de rare y las haga genericas, y que no vuelva a tomar KI en sus manos, si no es para hacer algo de la espectaculairad e impacto que tuvo KI en su tiempo.